Calamares 2010, por entregas

Pues esto va p'a largo, porque llevo editados 30 segundos de vídeo (véase prueba número 1) y la tarde no me ha cundido nada. Es por eso que voy a hacer la crónica por entregas, y así aumento la tensión y de paso hago que entréis más a menudo en el blog.

Prueba nº 1

Además, otra cosa. Voy a poner un anuncio buscando un cameraman, porque he visto, -revisando las fotos-, que he prestado tanta atención a la cámara de vídeo, que sólo sacaba la de fotos cuando me daba cuenta y el reportaje fotográfico deja bastante que desear. Hay muchas "lagunas gráficas" en este reportaje, creo.

Para empezar... ¿Ayer os cansasteis un poquito? Pues echad un vistazo rápido, señoritas, a esta comparativa. Hacersus caquita y empezad a antrenar. Pinchad, si os atrevéis.

Al lío: Amaneció un domingo espléndido. La fresca y ligera brisa que soplaba de la sierra traía aroma a fritanga de calamares. En Kandilandia, a las 8'05 de la mañana, estábamos sherpa-Chomin, sherpa-Rocinante, Luis, Rafa, Víctor, Carlos y yo mismo en persona. Desde Parque Robledo salían poco después sh-Kalambres, sh-Boli y sh-Mario. NO ESTABAN, porque habían salido media hora antes, el sh-gallina-Sherpa y el sh-gallina-Ete.

Aviso: Preguntad por si acaso, pero creo que en Ponferrada no os dejarán salir 2 horas antes. Cuidado.

La luz rasante y las sombras alargadas indican que era temprano. Los atuendos, que hacía fresco.

Esta imagen me recordó las antiguas películas del oeste cuando, al atravesar el desierto de Sonora, el protagonista se encontraba una res muerta como presagio de la dura travesía que le esperaba. Pero, como modernos Johnes Waynes, no nos daba miedo la aventura. Los sherpas, ya lo sabéis, semos asín.

Por la cuesta de los buitres, echando de menos los cánticos del sh-Sh, al que en esos momentos debían de estar sonándole los oídos.

¡Foto de sherpa sobre asfalto! Es cierto, hemos de confesar que, para reunirnos lo antes posible con el grupo de esquiroles y c*** que iba por delante, tomamos la carretera hasta la Fuente de la Reina. Vergüenza de la que no tenemos culpa, pecado que alguna vez nos será perdonado.

Ya en la Fuenfría, reproches varios, excusas vagas y atropelladas.

Bueno, ya... Incidente CASI olvidado.

Aquí, curiosamente en el punto más alto, empieza la etapa de verdad. Sólo la bajada(?) nos tomó un montón de tiempo, sólo que la que hicimos fue intensa y mil veces más divertida que si lo hubiéramos hecho por pista. Añado la interrogación a la palabra "bajada" porque en realidad fue un exigente rompepiernas, lo más alejado del término "monótono" que os podáis imaginar: bosque cerrado, raíces, praderones abiertos, sendas, trochas, piedras, cuestas arriba, vados... En fin, el paraiso sherpita, aunque un par de veces casi me abro la cabeza, más pendiente de la GoPro que de otra cosa.

Bueno, ya es hora: Hasta aquí, la primera entrega.

Segunda entrega: el descenso

Anoche recibí, no sin sorpresa por mi parte, la fotos del cada vez más avezado en temas informáticos sh-Escabeche. Son un auxilio que me viene muy bien para rellenar las lagunas de las que hablaba más arriba. Pero hay algo que me preocupa: En todo el rato que estuvieron esperándonos... ¡no sé qué hicieron!. Y digo que me preocupa a la vista de alguna de las imágenes que he revisado. Si no, que alguien me explique que coños estaba haciendo el sh-Kalambres aquí. ¿Es aficionado al break-dance?¿Está interpretando "Duelo al Sol" pero se le ha olvidado la cartuchera?¿Le ha dado uno de sus famosos kalambres?¿O es que se ha olvidado el taco, la mesa y las bolas, todo de golpe?.

Retomo la narración cuando llegamos a la Fuenfría. Aquí el relajado sh-Sh nos inmortaliza mientras sh-Roci y su primo van a lo suyo, pelín más atrás.

De la bajada trialera hay vídeo, pero ¡cualquiera para a hacer una foto! En un pinchazo de Mario, nos tomamos un respiro y unas piezas de fruta. Los que no conocían la ruta, pensaban que ya habíamos acabado. Pero lo cierto es que todavía nos quedaba un rato largo hasta la Fonda Real.

Aquí, reagrupamiento en el precioso collado de Navalmedio, después de una p* cuesta.

Vista del embalse de Navalmedio, ya camino de Navacerrada pueblo. ¡Vaya día espectacular!.

En la Fonda Real paramos un rato a reponer agua... ¡a Mario se le olvidó la camelbak!. Estuvimos un rato hasta que nos atendieron y perdimos mucho tiempo.

Sólo añado que desde el puerto de la Fuenfría hasta este punto tardamos una hora y media aproximadamente. Las averías, los contratiempos, los reagrupamientos son cosas con las que hay que contar siempre. Si hubiéramos tardado menos, ¡algo nos habría pasado después!. Yo, además, no lo cambio por bajar en media hora por la aburrida pista ¿no, sherpas y "agregados"?.

Hasta aquí puedo escribir. Me pongo con el vídeo.

Tercera entrega: el vídeo y un poquito más.

Pos fale. Después de atravesar Navacerrada (pueblo) con más éxito que el pasado año y, a pesar de que no nos perseguían los indios, enfilamos raudos las bonitas sendas que primero bordean y después se adentran en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.

Mucho sol y un viento a veces molesto nos acompañarían hasta el (lejano) final del recorrido. La sierra de Guadarrama, la sierra de Segovia vista desde Madrid, estaba espectacular, con sus cumbres aún cubiertas de nieve.

Cruzamos la M-608 y nos adentramos en el Parque, hasta el collado desde el que se domina el embalse de Santillana y, a sus orillas, Manzanares el Real, con su castillo. Pequeño refrigerio después de la subida, como el pasado año.

Y foto de la panda al completo. Y, aunque todos somos muy feos, es un grupo muy heterogéneo, en el que unos cuántos duplicamos (y más) la edad de otros. Unos de los Chiripitiflauticos y de la Casa del Reloj o Un Globo, Dos Globos, Tres Globos, otros de la Bola de Cristal y de Mazinger-Z. Los más jovencitos supongo que se habrán criado con Doraemon o algo así.

El sh-Sherpa no era de nada de lo anterior, que estaba cuidando gallinas.

Una panorámica del lugar. Pinchad.

Y, nada más atravesar la 607, justo al cruzar el río Manzanares, comienza una de las zonas que personalmente más me gustan. Unos senderos variados, con zonas pedregosas a veces, otras más arenosas, subidas pequeñitas y bajadas igualmente contenidas, además de algún vado. Todo fácil (ténicamente) y seguidito.

Y es por aquí por donde entramos a Colmenar...

...población en la que, con la excusa de una pequeña avería, aprovechamos para descansar, como consta en la instantánea de más abajo. Los domingos al sol.

Desde aquí, tendríamos que tomar la ruta que no tomamos en la primera edición y que nos hizo hacer un montón de kilómetros por el carril bici, como si no fuéramos sherpas.

Pero un sherpa nunca (¡NUNCA!) se volverá a equivocar con una opción en la que pueda unir dos puntos del camino mediante un recorrido pelín más divertido. En el diccionario sherpa, ya lo sabéis, divertido es casi siempre sinónimo de largo, puñetero, tortuoso y revirado... ¿no?. En este caso, tampoco fue para tanto. Pero eso es para otra entrega. Ciao.

Cuarta y última entrega.

Que a este paso se nos junta con la edición del 2011.

Estábamos en Colmenar. Esta vez los sherpas, más obedientes, seguimos el camino marcado, cosa que no hicimos el año pasado. No ha sido tan difícil ¿no?. Además, nos hemos ahorrado aburridos kilómetros de carril bici.

Para otras ediciones, recordad: doblamos en la ermita de Santa Ana (esto del GoogleEarth es la leche).

Camino muy bonito, teniendo en cuenta lo cerca que estamos del "pueblo más grande de la prvincia de Segovia". Volvemos a entrar en el Parque Regional de la C. A. del Manzanares y vadeamos varias veces. El frescor se agradece.

Al final, lo bueno se acaba y enlazamos con el carril bici. La parte positiva es que ya estamos cerca.

Pin, pin, pan, pan... Comenzamos a circunvalar Madrid al mismo ritmo que marcaba "el Piraña" en los años '90. El sh-Kalambres no veía la hora de llegar: ¡Este chico, pasando los 90 kilómetros, no es nadie!.

M-40, M-30, paisaje urbano, muchos semáforos, Casa de Campo...

Y al alcance de la mano, El Palacio Real y la catedral de La Almudena.

Subir hasta aquí fue un pequeño Tourmalet, debido a los kilómetros acumulados y a las ansias de cerveza. Mucha gente por las calles y un ambiente primaveral espectacular.

La Plaza Mayor sorprendida por una extraña invasión. Había menos gente que el año pasado... Se podía circular.

Dando color a la cosmopolita plaza.

Y ya estamos en el selecto garito. Tanto pedalear para tomarnos tres cervezas (eso sí, bien fresquitas y ricas) y dos bocatas en un pan más malo que pegar a un padre.

Al Kala le pareció tan rico, que a pesar de mi opinión, pidió 5 bocatas para el tren. Luego... pasó como con los patos de la famosa patada, que acabaron en una papelera después de pasearlos por todo Segovia.

Aparición estelar de Itos, Mark-Itos. Iba con sus famosos patines. Parecía (salvando las distancias) la chica del anuncio de Martini. Es la salsa de todas las aventuras, sherpa-honorario que lo mismo nos espera en la Plaza Mayor de Madrid que en el Chozo Aranguez con un melón y un par de chorizos. Un monstruo.

Última foto en el corazón de los Madriles. Luis y Domingo. Dos chavales.

Entonces... éstos son dos bebés, extraviados en la estación de Atocha. Aunque los que casi se extravían del todo son otros, que casi pierden el tren.

Y ya en nuestra querida Segovia, no podíamos dejar pasar la ocasión de brindar de nuevo con la bebida que ha hecho desarrollarse a la civilización occidental.

Y p'a casa, que el día siguiente es lunes.

El domingo más y, si es posible, mejor. Espero que el grupo sea al menos igual de numeroso, que hay varios sherpas que tienen que reincorporarse a la disciplina del equipo, y quedan pocas oportunidades para entrenar para superar los más de 3.000 m de desnivel de la 101 Peregrinos con una sonrisa en la boca.

Vale.